La que antaño se convirtió en capital histórica de los Estados Unidos se erige, en la actualidad, como una ciudad señorial repleta de vida y contrastes, que aúna lo mejor del pasado y presente. Boston es una de las urbes más prósperas del mundo. Centro puntero de la tecnología, medicina, educación o investigación a nivel mundial, por citar sólo algunas especialidades, esta ciudad estadounidense en la que se fraguó la independencia de Inglaterra allá por el siglo XVIII se presenta como un destino turístico de enorme atractivo también por la historia y belleza que esconden la mayoría de sus calles y esquinas.
Resulta ideal para el visitante emprender, cuando llega a la urbe estadounidense, el denominado The Freedom Trail, un camino que conecta 18 puntos señalizados de referencia histórica de Boston. Se parte del centro para visitantes Boston National Historic Park, que ofrece folletos e información variada de interés. Desde aquí se llega al Boston Public Garden, el jardín botánico más antiguo de todo Estados Unidos. Tiene un lago para pasear en barca en verano que se convierte en pista de hielo en invierno. No hay que dejar de dar una vuelta por el Quincy Market: Ambiente repleto de tiendas, músicos y artistas callejeros, pubs y restaurantes. La ruta cultural prosigue con la visita al Museum of Science, sobre todo si se va con niños; acoge más de 400 muestras interactivas, un IMAX y el planetario.
También merece la pena acudir hasta el Museum of Fine Arts, el más importante de New England. Los amantes de la cerveza pueden emprender el Sam Adams Tour para conocer el proceso de producción de la bebida, así como recorrer el barrio de Chinatown. En Granary Cementery se hallan los restos de grandes protagonistas de la historia de Estados Unidos.
La Old State House (siglo XVIII) es una de las construcciones más antiguas del país: Allí fue leída la declaración de independencia. Fuera de esta zona, emergen dos distritos de interés como Back Bay, repleto de casas de estilo victoriano y la Biblioteca Pública, así como Cambridge, que presenta la muy famosa Universidad de Harvard. Mientras, la zona más antigua de la ciudad, North End o barrio italiano, alberga la casa más estrecha de Boston, 44 Hull Street, de menos de tres metros de ancho.
Un viaje en barco por el Puerto de Boston permite descubrir la maravillosa mezcla entre gigantes rascacielos y añejas mansiones de casi 400 años. El pequeño pueblecito de Concord, ubicado muy cerca de Boston, acoge la célebre Orchard House, la casa donde vivió Louisa May Alcott, autora de la novela Mujercitas.
Con una oferta hotelera creciente, variada y de calidad, destacan hoteles ubicados en pleno centro de la ciudad, de cuatro estrellas con tarifas de fin de semana que parten desde los 250 dólares la noche. También hay opciones más económicas, hoteles donde se puede descansar por 140 dólares la habitación.